Psicología
Fue con la llegada del siglo XXI que se evidenció la existencia de la dislexia, una enfermedad silenciosa que se ha cebado con las personas que lo sufrían durante demasiado tiempo. No se tienen datos de cuantas personas fueron diagnosticadas con una discapacidad intelectual y necesidades especiales siendo disléxicos. Tampoco se conocen cuantas de ellas consiguieron salir adelante en su vida, salvo los casos famosos como el de Albert Einstein, por ejemplo. Sin embargo, ahora se sabe que la dislexia puede tener graves consecuencias en el futuro adulto y se ha asociado esta enfermedad (si no es tratada desde la infancia) al Trastorno Límite de Personalidad, depresión y ansiedad generalizada. Teniendo todo esto en cuenta, establecemos las consecuencias psicológicas de la dislexia en niños no tratados y animamos a todos los padres que estén atentos si su hijo presenta los síntomas de la dislexia.
Cuáles son las consecuencias psicológicas a corto plazo de la dislexia
Hay muchos síntomas que denotan un problema de dislexia. En ocasiones, se les diagnostica erróneamente con problemas en la visión, en otras, se cree que el niño “es un vago” que no se esfuerza. Esto es debido a que el pequeño puede tener grandes aptitudes y demostrar una gran inteligencia en otras situaciones por lo que no se llega a entender que pueda tener un problema de aprendizaje.
Hay un ejemplo muy interesante extraído de la película “Estrellas en la tierra” en el que el que un profesor del niño le muestra al padre una caja de un juego y le obliga a leer en chino hasta que el padre se desespera, de la misma manera que haría un niño ante la imposibilidad de descifrar los signos que están ante él. Aunque muy limitado es un maravilloso ejemplo para que entendamos lo que siente un niño con dislexia.
Aunque hemos ampliado los síntomas, más adelante intervendrían las dificultades de audición, problemas de orientación espacial, identificación de sonidos y, por supuesto, problemas para leer, escribir o las matemáticas.
Acoso Escolar
El bullying o acoso escolar es una de las grandes lacras a erradicar dentro del sistema educativo formal y, desgraciadamente, cuando un niño es diferente suele ser el blanco de las burlas del resto de sus compañeros. La detección precoz de la dislexia unida a un compromiso por parte de profesores del alumnado es muy importante. En ocasiones, es mejor cambiar de colegio para que este se adapte a una educación más abierta.
Ansiedad y depresión infantil
Al igual que cuando un niño sufre acoso escolar a causa de su peso o de su etnia, cuando es por la dislexia las consecuencias a corto plazo se pueden hacer evidentes en un cuadro de ansiedad y depresión infantil.
Fobia escolar
El aborrecimiento de la escuela parece que se da en absolutamente todos los casos. A los niños no les gusta madrugar para ir a clase. Sin embargo, cuando un niño tiene dislexia sufre fobia escolar del mismo modo que una persona que tiene aracnofobia se desmaya ante la presencia de una araña. El pequeño se siente alerta constantemente ya que percibe la escuela y a los demás niños como una amenaza.
Más allá de todas estas consecuencias, lo cierto es que estos niños tienen una manera muy especial de ver la vida que se ha materializado en las obras de arte e inventos tecnológicos de todas aquellas figuras históricas que desafiaron la forma de pensar de las personas sin dislexia.
Autora: Alex Bayorti (colaboradora de nuestro Blog de psicología en psicoadapta.es)