Martes, 07 de noviembre de 2017
Psic. Luis Treviño
- San Nicolás De Los Garza, (México)
Psicología Terapias Pareja
Psicología Terapias Pareja
La mayoría conocemos la historia de Edipo Rey escrita por Sófocles o hemos escuchado sobre el complejo de Edipo desarrollado por Sigmund Freud; es el complejo de una persona, especialmente durante su niñez, por el que manifiesta un evidente sentimiento de amor hacia al padre del sexo contrario y un sentimiento de rivalidad hacia el padre del mismo sexo; se aplica más concretamente al del hombre, por el que manifiesta amor por su madre y rivalidad hacia su padre. Y en contraparte, en las mujeres sienten rivalidad en contra de la madre y el enamoramiento surge con el padre, Carl Jung lo nombra como el complejo de Electra. (Para mas información de los complejos haz click sobre el concepto).
Durante la relación con nuestros padres vamos aprendiendo diferentes emociones y situaciones agradables y desagradable con las que podemos tomar el control de ellas y de acuerdo a este aprendizaje vamos a elegir a nuestra pareja.
Cuando escogemos a una pareja puede ser idéntica a uno de nuestros padres física, psicológica y emocional, así como también lo que no son. Por ejemplo de un caso que tuve en consulta:
C: Me doy cuenta que, mi esposa es la contraparte de mi mamá, no se maquilla tanto y no es protagonista en las reuniones, pero si es como mi papá, es una mujer independiente, trabajadora y proveedora del hogar.
T: ¿Como te sientes con esto que me dices?
C: Bien, porque no es una mujer que tengo que estar atrás de ella para que se mueva, pero no me gusta que si es agresiva y me resuelve como mi madre.
Somos lo que vemos, escuchamos y el silencio del entorno, repetimos los mismos patrones de manera inconsciente porque es con lo que aprendemos a lidiar en el diario. Y cuando no sabemos como afrontar la situación buscamos las maneras para poder continuar.
Cuando experimentamos comportamientos y/o emociones desagradables con nuestros padres, llegamos a decir: "Yo no quiero una pareja así", ahí se mueve la estructura de selección de pareja con la conducta no deseada, pero las características psicológicas y emocionales van a prevalecer. Por ejemplo de una clienta que acude a sesión porque no quiere una pareja alcohólica como su padre.
C: Yo no quiero una pareja alcohólica como mi padre. Todas las parejas que he tenido ninguna toma pero me tratan igual que él.
T: ¿Como han sido contigo tus parejas?
C: Han sido indiferente, agresivas, irresponsable y no respetan los acuerdos que tenemos.
Para establecer relaciones de pareja funcionales el trabajo primordial es con nosotros mismos, subsanar las heridas emocionales y las relaciones con nuestros padres. Dejar de relacionarnos como niños resentidos, para empezar con nuestras parejas una relación de una manera adulta de igual a igual y de manera funcional.
Los casos ejemplificados en este articulo cuentan con autorización de los clientes para ser expuestos en anonimato.